martes, 15 de junio de 2010

Con Nuestras Manos - Fiskales Ad-hok


(8)Y negamos y renegamos, del sano jardín nos escapamos(8)
No queremos quedarnos aquí, por eso lo negamos.
A veces debemos estar donde no nos gusta y hay que aceptarlo, pero existen limites. Hay personas que odiamos, lugares hostiles y situaciones molestas y por mucho que nos vendan algo "maravilloso", sabemos que no es para nosotros.

(8)Y te gritamos y te zamarreamos/ Y con nuestras manos disparamos(8)
Acción y Reacción.
No importan lo que digan, un arma no se dispara sola. Si se dispara, es por nuestras manos y con nuestras intenciones.

(8)Y no basta disparar tanto/ Es muy fácil ser pulento y violento/ Ese no es el cuento (8)
Disparar te hace mas fuerte?? Matar te hace superior??
Dicen que nuestras acciones son las que nos definen, pero ser violento no te define como superior, fuerte o importante. Si te detienes un momento, no solo no hay inferiores ni superiores, sino que todos somos igual de miserables por creer que somos de algún extremo.

(8)Fíjate bien donde van tus manos, sentimientos, no golpees a tu hermano/ si está en la misma dale la mano(8)
No podemos vivir llorando porque en el mundo hay desigualdad, pero si sabemos que el de al lado esta mal, no podemos salir con una sonrisa de payaso. Lo cortes no quita lo valiente y si somos capaces de verlo, sabremos que hacer para ayudar. Una persona cualquiera no puede cambiar el mundo solo con buenas intenciones, son las acciones las que buscan dejar al mundo mejor que como lo encontramos.

(8)Así juntos podemos soplar cada vez más fuerte y derribar casas y puentes(8)
Eso es ser un equipo, una verdadera sinergia, la suma de las partes juntas es mayor que la suma individual. La acción de grandes desconocidos jamas superara a un pequeño equipo. Coordinación, amistad y compañerismo da poder. "Denme un punto de apoyo y moveré el mundo.

(8)Con nuestras manos(8)
Las mismas manos que pueden golpear, apretar un gatillo y destruir.
Nosotros somos los que decidimos. Si las personas tienen manos es para decidir que hacer con ellas y si decidimos usarlas por otros, vale la pena hacerlo.
Ese es el verdadero poder de nuestras manos.